Esta pareja de jóvenes argentas son hermanastras y tienen una excelente relación. De hecho, ambas coquetean constantemente con el pecado, dándose besos mutuos y calientes masajes. Pero hoy una de ellas ha decidido por fin cruzar esa barrera y con la ayuda de su novio, iniciar a su hermanastra en el maravilloso mundo de los placeres, las pijas duras y las conchitas húmedas. Un espectacular trío amateur con el que te vaciarás las pelotas más de una vez.