Salomé Gil ha decidido aceptar ayuda especializada para ver si así es capaz de corregir una obsesión intensa que siente por un fetichismo: el fetichismo de pies. Tal vez este terapeuta sea capaz de curar el problema de la colombiana, pero antes necesita ver de forma práctica cuán grande es esa obsesión. Y lo cierto, es que Salomé sabe muy bien cómo dar placer con los pies.