La jovencita pintora Taylor Sands tiene hoy en su estudio a un atractivo modelo. Ella intenta ser profesional y tratar de observarle desde una perspectiva artística. Pero el calor que siente en su entrepierna es incontrolable y al final termina por dejarse llevar. ¿Moraleja? El verdadero arte en esta escena se encuentra en el sexo anal.